Por Soraya Constante
España es uno de los sitios donde algunos de los ‘starchitects’ que han recibido el premio Pritzker, el nobel de la arquitectura, han dejado su impronta. Aunque el término no es del agrado de estos arquitectos de fama mundial, lo cierto es que su obra atrae a un gran porcentaje de visitantes cada año.
Torre CEPSA – Foto © alexrotenberg/123RF.com
En el skyline de Madrid, por ejemplo, está la firma del estadounidense Philip Johnson, que en 1979 recibió el primer Pritzker de la historia. Johnson y el también estadounidense John Burgee diseñaron los dos edificios llamados Puerta de Europa, mejor conocidos como las Torres KIO porque fueron un encargo de la Kuwait Investments Office. Los dos rascacielos, inclinados 15 grados a posta, fueron inaugurados en 1996 y son considerados una puerta en el norte de la capital española, como las puertas urbanas de Madrid en el siglo XII, cuando la ciudad estaba amurallada.
Junto a la Puerta de Europa, en el conjunto de rascacielos de Madrid, está la Torre Cepsa conocida también como Torre Foster, precisamente por el arquitecto que la concibió: el famosísimo arquitecto británico Norman Foster, ganador del Pritzker en 1999. La torre, inaugurada en 2009, es una de las estructuras más altas de España con 250 metros de altura y 34 plantas de oficinas. La principal seña de identidad del rascacielos se encuentra en su coronación: un vacío enmarcado por una potente estructura plateada, diseñada para albergar turbinas de energía eólica, que finalmente no se llegaron a incorporar.
Puerta de Europa, Torres KIO – Foto ©sportgraphic/123F.com
Los arquitectos estrella suelen ser convocados
Barcelona no se ha quedado atrás y también ha convocado a los arquitectos estrella para que dejen su huella. El francés Jean Nouvel, que ganó el Pritzker en 2008, antes de recibir el premio, diseñó la famosa Torre Glòries, un rascacielos en forma de proyectil que es parte del skyline de Barcelona y se concibió como un homenaje a Gaudí. La torre fue muy criticada por desentonar con el paisaje arquitectónico de la ciudad, pero lo cierto es que poco a poco se ha convertido en el símbolo de la modernidad catalana. La torre tiene una base de planta ovoide, casi circular, y en su interior tiene un espacio diáfano sin pilares. La fachada exterior actúa como un gran muro cortina hecho de láminas de cristal que recubren todo el edificio. Estas láminas, con forma de persiana graduables, tienen distintos colores: en la parte inferior los más cálidos, como el rojo, que poco a poco se van enfriando hacia el azul y el blanco en lo alto. De noche, cuando la torre se ilumina de color, luce con especial belleza.
Torre Agbar – Foto © jelena990/123RF.com
En la misma capital catalana, el estadounidense Richard Meier, que recibió el Pritzker en 1984, diseñó en 2006 el museo de arte contemporáneo o Macba, que recuerda vagamente a la arquitectura de Le Corbusier, una de las mayores influencias en la obra de Meier.
Unir la innovación arquitectónica con la industria del vino español ha dado sus frutos. La pequeña localidad riojana de Elciego, que tiene 1.000 habitantes, es sitio de peregrinación gracias a la obra del canadiense Frank Gehry, que ganó el Pritzker en 1989, y rediseñó la sede de la bodega Marqués de Riscal. Poco antes, este arquitecto había cambiado para siempre la arquitectura museística con el Museo Guggenheim de Bilbao, y siguió la misma estela con la bodega de La Rioja. El complejo, que incluye un hotel, tiene un entramado metálico que se prolonga al exterior por medio de pérgolas que, además de enmarcar el panorama y proporcionar sombra, se convierten en la seña de identidad del edificio gracias a los tonos de sus acabados: el color rosa representa el vino tinto; el oro, la malla característica dorada de las botellas de Marqués de Riscal;y el plata, la cápsula de dichas botellas.
Bodega Marqués de Riscal – Foto © mme123/123RF.com
En la Rioja también está la firma de la iraquí Zaha Hadid, la primera mujer premiada con un Pritzker. Fue en el año 2004. Hadid diseñó el Pabellón de Bodegas López de Heredia inicialmente para una feria en Barcelona, pero la estructura fue trasladada a la ciudad de Haro, en la Rioja.
Uno de los ganadores más recientes del Pritzker, el japonés Arata Isozaki, que recibió el premio en 2019, está detrás del Domus la Casa del Hombre, en La Coruña, inaugurado en 1995. El Domus, un museo de las ciencias situado en una zona acantilada próxima al mar, encaja perfectamente con el entorno marítimo, con una fachada ondulada compuesta por más de 6.000 tejas de pizarra que parece bailar con el viento.
Bodegas López de Heredia
Pero si hay un lugar donde se puede ver la estela dejada por los ‘starchitect’ es el hotel Puerta América, en Madrid. El diseño de este hotel, en 2005, convocó a cuatro famosos arquitectos de los que ya hemos hablado en este artículo: Jean Nouvel se encargó del ático, la planta 12 y la fachada, que decoró con frases extraídas del poema Liberté de Paul Éluard. Zaha Hadid firmó la primera planta, en la que usó líneas curvas y consiguió dotar de una particular luminosidad blanca. Esta planta ha sido descrita en diversas ocasiones como un espacio de ciencia-ficción. Norman Foster se encargó de la segunda planta, en la que buscó transmitir la idea de elegancia, lujo y flexibilidad. Por último, Arata Isozaki diseñó la décima planta utilizando elementos tradicionales de Japón como paneles de madera. Otros arquitectos de renombre como David Chipperfield, Ron Arad o Marc Newson también dejaron su huella en este edificio.
Este hotel es un ejemplo único de trabajo colaborativo entre algunos de los mejores arquitectos en la actualidad, por si alguien lo quiere incluir en su itinerario.
De vuelta a los premios Pritzker, el premio se ha otorgado todos los años desde hace 42 años. El galardón de este 2021 fue para los franceses Anne Lacaton y Jean-Philippe Vassal que se han hecho famosos por su principio de nunca demoler, y hacer una arquitectura que sirve a la humanidad. Lacaton & Vassal ha desarrollado más de 30 obras en Europa y África occidental, desde instituciones culturales privadas a espacios públicos, viviendas sociales y planes maestros. Una de sus obras más importantes, la remodelación de 530 viviendas en Burdeos (Francia), ganó el EU Mies Award en 2019, demostrando qué tan lejos puede llegar su principio.
Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona – Foto ©sportgraphic/a.com
En la historia del prestigioso premio hay 23 países con al menos un arquitecto o arquitecta ganador(a). En la mitad de las ocasiones el premio ha sido para algún país europeo. De Latinoamérica, hasta ahora solo tres arquitectos han recibido el prestigioso premio: el mexicano Luis Barragán, el chileno Alejandro Aravena, y los brasileños Oscar Niemeyer y Paulo Mendes da Rocha.