Las ciudades inteligentes son tal vez la tendencia más importante del sector inmobiliario de cara a la segunda mitad de la década, con buena parte de las constructoras enfocándose en optimizar la implementación de herramientas innovadoras en todo tipo de estructuras.
Aunque al hablar sobre construcciones inteligentes muchos piensan principalmente en la vivienda, lo cierto es que cada vez más edificios comerciales están apoyándose en nuevos paradigmas tecnológicos para brindar herramientas comerciales a todo tipo de empresas. Es aquí donde entra la Smart tech, o tecnología inteligente.
¿Qué es la Smart Tech?
La Smart Tech no es más que la implementación de herramientas tecnológicas que brinden funcionalidades adicionales a dispositivos y estructuras tradicionales, principalmente en lo referente a comunicaciones, procesamiento de información y capacidad de conectividad. No es muy diferente a lo que ya hemos visto con los teléfonos o la línea blanca inteligente.
Sin embargo, en el caso de edificios, almacenes y otro tipo de instalaciones, es necesaria una inversión importante en la modernización de la estructura, incluyendo la adición de nuevo cableado para internet, mejoras para facilitar la transmisión de datos mediante conexiones inalámbricas, e incluso la sustitución de maquinaria obsoleta.
Mientras que en los edificios antiguos es necesario un proceso complejo de remodelación para integrar este tipo de tecnología, en la mayoría de los edificios modernos esta se integra desde el momento en que se concibe el proyecto.
Smart Tech en edificios comerciales
Al hablar de tecnologías inteligentes en los edificios de viviendas, hacemos referencia principalmente a la seguridad y gestión de recursos, sin embargo, en los edificios comerciales es necesario incluir herramientas adicionales para optimizar el rendimiento empresarial. Estas son algunas de las más importantes:
• Sistemas de gestión
Todo edificio inteligente debe contar con un sistema de gestión diseñado para centralizar el proceso de monitoreo de las instalaciones. Las herramientas que mencionaremos a continuación, por ejemplo, se conectan directamente al sistema de gestión para permitir que el personal de pueda controlar sistemas cruciales, desde la ventilación hasta el acceso.
• Seguridad
La mayoría de los edificios comerciales modernos cuentan con sistemas para monitorear el acceso de personas, lo que limita las posibilidades de intrusiones no autorizadas. El control de acceso con tarjeta, los sensores biométricos y otras herramientas de validación de credenciales son necesarios para mantener un registro constante del movimiento dentro de las instalaciones inteligentes.
• Internet de las cosas
Los edificios comerciales se benefician particularmente del Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) ya que es la tecnología que permite la interconexión entre dispositivos, asegurando que toda la información recopilada pueda ser almacenada y compartida entre departamentos.
Además, permite medir de forma precisa todo lo que ocurre dentro de las instalaciones y controlar aspectos como la temperatura, la calidad del aire, el uso de energía, entre otros.
• Inteligencia Artificial
La inteligencia artificial en edificios comerciales tiene como objetivo recopilar y curar tanta información como sea posible, ayudando a las empresas a estar informada sobre la actividad dentro de las instalaciones, así como el mercado en general. Estos datos pueden servir para reconocer patrones de consumo, desarrollar nuevas estrategias, e incluso auditar el rendimiento del negocio.
Retos
Al momento de concebir un edificio comercial que integre este tipo de tecnologías, es importante tener en cuenta que existen retos importantes. Entre ellos podemos encontrar:
• Privacidad
Al utilizar herramientas de almacenamiento y transmisión de información basados en el monitoreo de redes de comunicación, videovigilancia y control de acceso, tanto empleados como clientes ven su privacidad afectada.
En muchos casos, estos dispositivos pueden incluir una gran cantidad de información, incluyendo reconocimiento facial, datos personales y biométricos (como huellas digitales o imagen de retina), credenciales de acceso, entre otras.
Por este motivo, los edificios comerciales diseñados de la mano de tecnologías inteligentes deben atenerse a políticas estrictas en cuanto al manejo de datos personales, siguiendo los lineamientos especificados por las autoridades para evitar poner en peligro la privacidad y la intimidad de quienes los transitan.
• Incompatibilidad
En el caso de los edificios antiguos, la integración de este tipo de tecnologías puede no ser tan sencilla, requiriendo de grandes inversiones en remodelación, así como en la compra de equipamiento y maquinaria. En el peor de los casos, muchas de estas innovaciones pueden ser incompatibles con la infraestructura, limitando su capacidad de modernización.
• Ciberseguridad
Debido al gran manejo de información que recopilan los dispositivos inteligentes en edificios comerciales, estos son un blanco atractivo para los cibercriminales. Un ataque no solo puede dar como resultado la filtración de información privada y datos confidenciales, sino incluso la pérdida de acceso a cuentas bancarias y el cese de operaciones.
Las empresas que funcionan en edificios comerciales “inteligentes” deben contar con protocolos de ciberseguridad sólidos basados en el asesoramiento profesional, la implementación de herramientas de seguridad modernas, y la educación del personal.