Estilo vintage en Palacio

Por: María Gracia Banderas

Es una mujer dinámica y de buen gusto. Pese a su juventud, es amplia la experiencia acumulada en torno al mundo de la moda y su comercialización. Los ambientes en los que su vida se desarrolla son tan distintos como las actividades que realiza en ellos. Su hogar mantiene un estilo clásico inglés, mientras que Palacio, el nuevo local comercial, refleja un ambiente vintage sesentero.

Cristina Mena, Fashion Director de Kolonaki, conversa con CLAVE! sobre tendencias, moda, diseño, estilos de vida, decoración, arquitectura, y todo cuanto involucra el día a día en su mundo. Recuerda con especial cariño a Milán, ciudad en la que estudió Administración de Empresas especializándose en moda. Hizo prácticas en Calvin Klein y trabajó en Dolce & Gabbana durante tres años; cursó su maestría en Retail Management y Buying, y luego adquirió mayor experiencia en Yoox, una de las redes de moda on-line más grandes del mundo.

Con esa amplia trayectoria Cristina se convirtió en experta en compras y merchandising, pero destaca por su especial sensibilidad para entender y detectar los estilos y preferencias de sus clientes. “Todos los mercados son distintos, cada sociedad tiene necesidades que están determinadas por la ubicación geográfica, cultura o estilo de vida de su gente, entre otros aspectos. Estoy en contacto con una nueva generación que busca algo distinto y tiene mucha interacción en las redes sociales, lo cual estimula su creatividad”.

A través del servicio personalizado que oferta en sus tiendas, Cristina es capaz de percibir la evolución en los gustos y avizorar tendencias. Resalta en este sentido que su experiencia en Italia fue trascendental, pues a partir de ese momento entendió la gran importancia del trato personal y del buen servicio. Este detalle es precisamente lo que ha posicionado a Kolonaki en un nivel difícil de superar. No se trata únicamente de perfección en atención al cliente, sino también de asesoría en imagen, y por supuesto, de regalar una maravillosa experiencia de compra a sus clientes.

Ella es apasionada por su labor y procura “aprender día a día de su entorno y de las maravillosas mujeres que visitan sus tiendas”. Agrega que “como distribuidores, su finalidad es representar de la mejor manera a las más de 40 marcas que ofrece a sus clientes. Algunas de las más reconocidas que comercializa en Kolonaki son Diane von Fürstenberg, Elie Tahari, y Tadashi Shoji”.

Cristina nos abre las puertas de Palacio, su nuevo proyecto, que es probablemente el que lleva con más ilusión porque tiene un significado muy especial. Fue el último que desarrolló de la mano de su padre, Manuel Mena Tobar, quien siempre la incentivó y apoyó para alcanzar sus metas. “Confió en mí y me impulsó a hacer de este sueño una realidad”, nos dice emocionada.

Palacio, tienda ubicada en Quicentro Shopping, es la segunda línea de Kolonaki. Se encarga de distribuir importantes marcas australianas, europeas y estadounidenses, distintas a las de la tienda original, pero igualmente reconocidas a nivel mundial. Es una alternativa que ingresa al mercado quiteño para satisfacer las necesidades de la mujer moderna.

Tonos rosa, dorado y gris, maderas de color claro y marmoleados, son los detalles tenues y femeninos que nos enamoran con tan solo ingresar a Palacio. La iluminación dirigida invita a visitar cada uno de los rincones de la boutique en la que una pequeña sala ha sido dispuesta para atender a los clientes. La tienda es acogedora, casi como estar en casa.

El concepto vintage sesentero es el predominante en Palacio. Los espejos, una silla de 1950, el dorado y las lámparas redondas, entre otros detalles, están inspirados en Gio Ponti, arquitecto, diseñador y artista italiano. “Se trata de un estilo retro muy sutil que está indudablemente enfocado al futuro”. Cristina y Lampo Studio, en trabajo conjunto, plasmaron el concepto de la tienda que responde a las tendencias y colores que se manejan en la decoración de exclusivas tiendas comerciales a nivel internacional.

Cristina se inspiró en la pureza de lo femenino y en las sensaciones para la decoración, prestando gran importancia a la razón de ser de Palacio y a la comodidad de sus clientes. “Es muy importante no considerar solo la parte estética del local, pues más allá de eso, cada espacio debe ser funcional y lograr el objetivo para el que fue planteado. Por ejemplo, la forma en la que están exhibidas las prendas tiene una razón de ser, y se debe a estrategias de merchandising y visual merchandising, que lo que pretenden es lograr una experiencia positiva en el cliente. Esto se cumplirá si el entorno está planteado acertadamente”.

El concepto de interiorismo en Palacio es muy fresco. Probablemente nació de las experiencias obtenidas por Cristina en sus viajes y en detalles que observa al caminar por las calles del mundo. Es ahí donde asimila nuevas tendencias, y ese sexto sentido lo enriquece asistiendo con frecuencia a desfiles de moda y ferias textiles. Si bien el New York Fashion Week es un evento imprescindible en su agenda, no deja de estar actualizada en todo cuanto sucede en arquitectura y diseño, pues afirma que estas actividades están muy relacionadas con lo que acontece en la industria en la que se desenvuelve.

La tendencia actual en moda femenina se desarrolla contemplando parámetros en los que la mujer puede desenvolverse en su día a día con comodidad. “Hay una corriente fuerte en zapatos bajos o con plataformas enteras. Es importante siempre tener una chaqueta a mano, y por supuesto, conocer tu cuerpo para saber qué es lo que te queda mejor”.

Un día en la vida de Cristina puede ser absolutamente distinto al siguiente. En su agenda constan reuniones con proveedores, visitas a sus tiendas, contacto con sus clientes, viajes y otras actividades relacionadas con su profesión. Además es golfista y lleva una vida bastante saludable, aunque confiesa que le encanta conocer lugares nuevos para almorzar o cenar.

Luego de una ajetreada mañana de fotografías en el ambiente vintage de Palacio, nos trasladamos al departamento de Cristina en la Ave. González Suárez, en el que vive con su familia. Aquí la decoración es clásica, totalmente opuesta a lo que rodea su mundo profesional, a pesar de lo cual, lo acogedor de los ambientes prevalece en los dos estilos.

Arte y antigüedades familiares toman protagonismo en la decoración de su hogar. Cuadros, esculturas y pequeños detalles se imponen en paredes y consolas. Madera, paredes blancas y elementos rústicos imperan. “Mi lugar favorito es la sala de estar, es el lugar en el que me siento a hacer mis brain stormings; pero confieso que tal vez el balcón se lleva mi corazón. Amo Quito y disfruto de ver la ciudad, observar el Pichincha y otros detalles”.