Por Alegría Guarderas
Dedicación, pasión, integridad y visión son algunas de las cualidades que se requieren para ser un líder ejemplar. Un excelente referente es Daniela Matheus, quien desde 2015 ocupa el cargo de Gerente General en Globalsfera. Su gestión va más allá de los aspectos puramente constructivos en la firma, dando un giro importante al concepto de Responsabilidad Social Empresarial.
Daniela cuenta con una larga y exitosa trayectoria profesional y hoy uno de sus mayores retos es posicionar a Globalsfera como una marca líder en el país, afianzando valores de solidez y credibilidad. Paralelamente, es Vicepresidenta de Estrategia y Seguimiento en Afinity Global Partners- AGP, una corporación internacional de la cual Globalsfera forma parte.
¿Qué iniciativas de Responsabilidad Social Empresarial han ejecutado?
Nuestra visión y misión está enfocada en el desarrollo de proyectos manejados bajo conceptos de Responsabilidad Social Empresarial, vinculados con desarrollo comunitario y asistencias específicas. Por ejemplo, trabajamos muy de cerca con el Hospital Baca Ortiz, con la Fundación Hermano Miguel, y nos involucramos en un tema de comedor en Bahía de Caráquez. Son proyectos muy puntuales y los venimos haciendo a lo largo del tiempo. A raíz del terremoto que afectó gravemente a un sector de la costa ecuatoriana, decidimos incursionar en un proyecto con enfoque integral que vaya más allá de la entrega de viviendas.
¿En qué consistió?
En una intervención de carácter social con el afán de crear un modelo que pueda replicarse. El proyecto se llama “Mi Propósito en Bahía”. Nació como inciativa corporativa y durante el proceso de desarrollo se decidió incluir a actores que ya tenían experiencia en reasentamientos comunitarios. Nos aliamos con Fundación Esquel a través de su Presidente Boris Cornejo, y gracias a esta importante alianza presentamos el plan de construcción de 20 viviendas en Bahía para la Fundación Holcim, dentro del proyecto “Juntos por Ecuador”.
¿Cómo se ejecutó?
Fue un proyecto de cinco fases. La primera consistió en asistencia inmediata, en la segunda se hizo la entrega de refugios temporales, durante la tercera se reconstruyó la comunidad desde el tema social, y posteriormente, el 18 de mayo de 2018, se entregaron 20 casas que están dentro de un conjunto habitacional.
¿Y la quinta etapa?
La quinta y última etapa se ejecutará una vez que se asienten las personas. En este último paso se va a determinar una actividad económica que ayude a los beneficiarios a generar ingresos. Es decir, se les va a dar las herramientas para que puedan sostenerse por sí mismos. El compromiso es reactivar su economía para que la comunidad sea sostenible y sustentable con el tiempo.
¿Quién estuvo a cargo de la construcción de las casas?
Nuestro arquitecto Raúl Gavela Charvet se encargó del diseño y se contrató a personas locales para la construcción. Son casas pre fabricadas, de una sola planta y sismo resistentes, para prevenir un posible desastre natural de magnitud similar.
¿Cómo seleccionó a los beneficiarios?
Este proceso fue el más largo, pero también el más importante. Se recibió alrededor de 40 solicitudes cuando el proyecto estaba diseñado para 20 familias. La Fundación Esquel nos dio las directrices que debíamos aplicar en el proceso de selección, y estaba claro que había que beneficiar a personas que realmente lo perdieron todo. Se evaluaron una serie de factores: que los solicitantes no tengan propiedades en otros lugares del cantón, su composición familiar, ingresos económicos, entre otros.
¿El aporte fue de gestión o también económico?
El aporte de la corporación a la que representamos en la línea de construcción fue del 65% incluido el terreno y diseño del proyecto. Cabe resaltar que fue muy importante la participación del Gobierno Municipal de la zona, el aporte de la empresa privada, y las donaciones que se recibieron a título personal para sacar adelante este proyecto.
¿Esto es parte de tus funciones como Gerente General de Globalsfera?
El reto es estar consciente de los objetivos a corto, mediano y largo plazo. Visito los proyectos, busco alianzas estratégicas, delego funciones, analizo el tema financiero y evalúo el ambiente de trabajo dentro de la oficina. El ámbito de la construcción contempla un abanico de temas con los cuales debo estar familiarizada, porque soy una vendedora más en la compañía. Pero más allá de eso, lo más importante es transmitir ética, enfoque, transparecia, visión y valores bien consolidados, que vayan siempre de la mano con la responsabilidad social empresarial.
¿Qué proyectos tienen al momento?
Sfera I que está ubicado en el sector de la Av. Eloy Alfaro y Granados, y lo entregaremos a finales de septiembre del presente año. Son departamentos de uno, dos y tres dormitorios. Adicionalmente empezamos el movimiento de tierras de Sfera II, ubicado en Lomas de Monteserrín, que se entregaría en octubre 2019. Son 24 departamentos con terrazas desde las cuales se aprecia una vista privilegiada de los valles de Cumbayá y Tumbaco.
¿El concepto arquitectónico?
Nuestra oferta va acorde a lo que el cliente busca y necesita. Para entenderlo hacemos un testeo entre los potenciales compradores del segmento al que vamos a dirigir el proyecto. Nos enfocamos en crear espacios personalizados, bien distribuidos, para familias que ya no son tan numerosas como antes. La nueva generación es muy demandante y busca ambientes más relajados, y nuestra intención es ofrecer productos de calidad en términos de arquitectura y diseño, que cumplan con altos estándares de construcción, y principalmente con las expectativas del cliente. Estamos siempre cerca de nuestros clientes, asesorándolos y trabajando junto a ellos en lo que será su nuevo hogar.
¿Hay equilibrio entre lo personal y profesional?
Es complicado, pero no imposible. Demanda muchísimo tiempo entender todos los detalles de una industria que fue nueva para mí. Sin embargo, si organizas adecuadamente el tiempo puedes conseguir un balance. Es importante dejar espacio para hacer lo que te gusta, y no olvidarte que también tienes metas personales.